Hola panda de majos!
Este año ha venido cargado de inspiración y nuevos propósitos para izarix.
Estamos trabajando en invitaciones de boda y comuniones, en nuevos packs de diseño para emprendedores, en packs de regalo originales y un montón de cositas más. Así que como veis mis neuronas solo paran cuando les pido por favor que me dejen dormir un rato o cuando necesito urgentemente una buena idea (muy oportunas ellas).
Pero resulta que hoy he mirado el calendario (por eso de saber en qué día vivo) y me he dado cuenta de que el primer mes del año ha volado. Enero se esfuma, dejamos la primera cuesta y nos metemos en la segunda. Y en cuanto empezamos a pensar en febrero, me inundan la mente corazones rojos, ramos de flores, bombones y más corazones, rojos por supuesto. (Ya os digo que a mis neuronas las tengo que entrenar mejor).
Y digo yo. Mira que no hay cosas bonitas para regalar. Entre ellas las súper láminas (que voy a decir yo) de izarix :P
Pero es que hoy no me conformo. Así que os propongo que este San Valentín celebréis el amor de una forma diferente. Vale que hay que ser románticos, y darle esa chispita, repito, sólo chispita ñoña, que a veces nos gusta tanto. Pero estaba yo pensando… El amor no solo se demuestra con bombones; y tampoco es exclusivo de la pareja. Dile te quiero a tus padres, a tus hermanos. Haz ese favor tan importante a un amigo. Marcate un «yo invito» con tus compis del curro, o simplemente ayuda a tu vecino a terminar por fin de pintar la habitación. Cállate cuando lo que vayas a decir pueda ofender. Contesta al cajero con un «buenos días» o sonríe al coger el autobús. Todo eso son gestos de amor. Y yo reivindico que San Valentín no sea solo una roja celebración parejil, sino que ampliemos el significado y contagiemos este febrero de buen rollo.
Ale. Ahí lo dejo. :P